Antes de la pandemia de coronavirus, Sony había repetido en múltiples ocasiones que planea hacer la transición de los propietarios de PlayStation 4 a su sistema de próxima generación lo más rápido posible. Un nuevo informe de Bloomberg sugiere que los planes pueden estar cambiando entre bastidores, sin embargo, debido al alto precio de la PlayStation 5 y a la limitada oferta.
De hecho, la publicación afirma que el gigante japonés podría intentar atenuar el impacto de un lento despliegue de PS5 reduciendo el precio de las consolas PS4 y PS4 Pro. Se espera que esto encierre a la gente en el ecosistema y estimule las lucrativas suscripciones a PlayStation Plus y PlayStation Now, que se han convertido en una especie de vaca lechera para la compañía.
«El director general de Sony, Kenichiro Yoshida, ha dicho que la empresa se propondrá aumentar los ingresos recurrentes en lugar de comprar hardware de una sola vez», escribe la publicación. Todo esto suena como un marcado cambio con respecto a la estrategia original de PlayStation, especialmente cuando se hablaba de convertir a los usuarios a un ritmo sin precedentes hace apenas seis meses.
Por otra parte, el mundo ha cambiado dramáticamente en un período de tiempo muy corto, ¿no es así?